Unity anuncia cambios en sus políticas para desarrolladores: una nueva propuesta amigable y ligera
Unity, una de las plataformas más populares en el desarrollo de videojuegos, ha presentado recientemente un nuevo enfoque en sus políticas para desarrolladores, luego de polémicos cambios que generaron controversia en la comunidad. En un esfuerzo por escuchar y responder a las preocupaciones de los usuarios, Unity ha realizado ajustes significativos en su política de tarifas y cargos por instalación de juegos.
Cambios en las tarifas y cargos por instalaciones
En una carta abierta dirigida a los desarrolladores, Marc Whitten, líder de Unity Create, detalla los cambios implementados. Ahora, los usuarios de Unity Personal o Plus no serán cobrados por instalación de juegos. Por otro lado, aquellos que utilicen Unity Pro o Enterprise podrán optar por un 2.5% de participación en los ingresos en lugar de pagar una tarifa. Además, los cargos por instalación solo aplicarán a las versiones futuras de Unity, comenzando con la próxima versión de Long Term Support (LTS) que se lanzará en 2024.
Un aspecto importante a destacar es que los juegos creados con versiones anteriores de Unity, incluyendo la versión actual 2022 LTS, no serán afectados por los cargos. Asimismo, solo los juegos desarrollados con niveles Pro o Enterprise de Unity serán elegibles para la tarifa, y aquellos que generen menos de $1 millón en ingresos trimestrales no deberán pagar ningún cargo adicional.
Nueva terminología y proceso de facturación
Unity también ha introducido cambios en la terminología utilizada, reemplazando el concepto de «instalaciones» por «engagements iniciales» (compromisos iniciales). Según explican, esto se refiere al momento en que un usuario adquiere, descarga o interactúa legítimamente por primera vez con un juego desarrollado con la tecnología de Unity. Además, Unity ha decidido basar los cargos en los ingresos reportados por los propios desarrolladores, en lugar de recolectarlos ellos mismos.
Opción de participación en los ingresos
Uno de los cambios más destacados en la política de Unity es la opción de los desarrolladores de optar por un 2.5% de participación en los ingresos en lugar de pagar una tarifa fija. De esta manera, aquellos que prefieran compartir parte de sus ganancias con Unity podrán hacerlo, permitiendo un mayor flujo de efectivo durante la etapa inicial de desarrollo de un juego.
En definitiva, Unity ha demostrado su compromiso con los desarrolladores al escuchar y responder a sus preocupaciones acerca de la política de tarifas y cargos por instalación. Los cambios implementados buscan aliviar la carga financiera para aquellos que utilizan Unity Personal o Plus, mientras que ofrecen opciones flexibles para aquellos en los niveles Pro o Enterprise. La nueva terminología y el proceso de facturación basado en ingresos reportados por los desarrolladores también brinda mayor transparencia y control en el proceso.
Unity continúa siendo una de las plataformas más populares para el desarrollo de videojuegos, y con estas nuevas políticas, se espera un mayor apoyo y adopción por parte de los desarrolladores. Sin duda, estos cambios refuerzan el compromiso de Unity de mantener un entorno favorable y amigable para la comunidad de desarrolladores de videojuegos.
Como siempre, Unity se mantiene a la vanguardia en la industria del desarrollo de videojuegos y continúa brindando herramientas y recursos para impulsar la creatividad y la innovación en este emocionante campo.